martes, 30 de abril de 2013

Mis aportes Bibliotecologia

Reflexionar en un sentido de la vida diferente al hecho mismo de vivir y existir, cualquiera que el sea,  nos coloca ante la fascinante actitud de ser creadores, de ser forjadores de sueños y de cultura.  Creer  en un sentido de la vida, dar un sentido a nuestra vida significa proyectarnos hacia el futuro con una certeza por desarrollar, por un plan que cumplir, para no permitir que nuestro tiempo de permanencia en el universo se extinga estéril, sin haber dado los frutos que la misma  naturaleza  exija. Se hace entonces necesario que las bibliotecas, esos centros de sabiduría; sean el reflejo directo de toda la sabiduría que ellas poseen, se hace necesario romper con el paradigma que en la biblioteca solo se consulta, por el contrario allí se puede “aprehender a ser” y ese debe ser su principal objetivo.


Los novísimos aparatos tecnológicos, capaces de almacenar cualquier cantidad de información, colocan a los individuos ante la expectativa de no concurrir a las bibliotecas, pues la Internet  la facilita con el solo teclear un botón.  Así las cosas,  al perderse una de las específicas calidades que eran su patrimonio, hacen que nosotros, los especialistas en bibliotecología,  busquemos nuevas opciones para congregar alrededor de las bibliotecas, no solo a quienes necesitan de la información, sino que buscamos convertirlas en centro productor del conocimiento, en vórtices desde los cuales bien podría concitarse a la nueva visión del mundo que todos ansiamos y queremos, donde las posibilidades de igualdad a partir del conocimiento se den sin restricciones, y mejor aún, donde todos contribuyan en función del desarrollo y crecimiento social.